Nada como el paso del tiempo para olvidarte de cómo son las cosas…
Bueno amigos, recupero el blog (que por otro lado nunca abandoné) y lo hago con un problema que no tenía pensado tratar. Teniendo varias temas en la recámara que compartir con vosotros (incluido uno culinario), hoy me gustaría reflexionar un poco sobre algo que todos conocemos: la CRISIS. Ese estado en el que se encuentra nuestra economía (y por ende, nosotros mismos) y del que por el momento no veo intenciones serias por parte de nadie para que salgamos de él.
¿Y en qué momento siente uno la necesidad de soltar una chapa así? Pues bien, todo ha empezado esta mañana, cuando me he despertado con el bolsillo generoso y he dicho: "Venga, me acerco al Plaza Norte y hago un combo Fnac + búsqueda de ropa". Ya sabéis, nada como gastar unos cuantos euros disfrutando de la brisa de la mañana… ¡¡Y en qué momento amigos, en qué momento!!
Ha sido llegar a la Fnac y de repente los viejos fantasmas del pasado han caído como losas sobre mí. A cada paso que daba mis bolsillos se hacían más pequeños y se escondían en mi pantalón. Y es que estaban asustados… ¿De qué, os preguntaréis? Pues ni más ni menos que de los precios desorbitados que estaban contemplando.
Y hago un pequeño paréntesis aquí porque seguro que alguno salta con aquello de… "Te lo tienes merecido por ir a comprar allí" o el clásico "Es que la Fnac es cara de c*j*nes". Y estoy de acuerdo, sé que en Madrid hay sitios más baratos, pero como tienen una promoción actualmente (de la que igual alguno quiere aprovecharse) por la cual si llevas una película ya sea en VHS o DVD te dan un vale de descuento de 5 o 7 euros para comprar otra, he decidido hacer uso de ella y renovar la videoteca. Tenía pensado comprar un par de temporadas de una serie e incluso mirar un par de blu-rays, pero cuando he visto que las temporadas no bajaban de 20 euros y que los blu-rays no lo hacían de 30, ahí es cuando he dicho… ¿Crisis? ¿Crisis para quién? No será para esta panda de cabrones careros...
Creo que nadie en su sano juicio con los tiempos que corren puede permitirse el lujo de gastarse semejante dinero en ocio. Y sobre todo, gastarse ese dinero sabiendo que a través de Internet puedes tener los mismos artículos no por la mitad de precio, sino incluso en ocasiones por la tercera parte. Así que de la que iba teniendo claro que iba a salir de allí sin comprar, he entrado en Internet y efectivamente, gracias a www.play.com he vuelto a salir de dudas. Precios infinitamente más baratos fuera de España por los mismos productos.
Y ahí es cuando he recordado por qué hacía tanto que no iba por allí. Y por supuesto, cuando me ha entrado el cabreo al pensar por qué tenemos que soportar que continuamente nos estén timando. ¿Es esta la forma que tienen de fomentar el consumo? ¿Poniendo esos precios? Yo creía que el consumo se fomentaba dando facilidades a la gente para que consuma, valga la redundancia. Porque lo que está claro es que si aquí una película nos cuesta 30 euros y en el Reino Unido cuesta 15, una de dos, o las tiendas inglesas pierden dinero o las españolas tienen unos beneficios espectaculares. Y como no creo que los empresarios ingleses sean tontos, al final uno se da cuenta de que los tontos acabamos siendo nosotros, los españolitos de a pie que dejamos que se cometan estos abusos.
Total, que con las mismas he dado una vuelta, he acabado por indignarme y he reservado el dinero que gano con el sudor de mi frente para las tiendas de los hijos de la Gran Bretaña. ¡Gracias Internet!
Pero ahí no ha acabado mi periplo mañanero...
Al salir de allí he pensado: "Necesito unos vaqueros, así que veamos si tengo más suerte comprando ropa". Y cual ha sido mi sorpresa cuando al entrar a un Pull & Bear compruebo que todos los pantalones vaqueros están desgastados, rotos o desteñidos. No hay ni uno solo normal, y por normal entiendo sin rotos ni manchas (esas ya me las hago yo solo, gracias). Y de nuevo me pregunto: ¿esto es moda o será que me voy haciendo viejo? ¿O será que hoy no estaba destinado a comprar nada de nada? ¿Será cosa de la crisis?
El caso es que por unas cosas o por otras, al final me he dado el paseo en balde. Eso sí, hoy he tenido más claro que nunca aquel famoso eslogan que decía: "Busque, compare y si encuentra algo mejor, cómprelo" . Y eso es lo que he hecho… pero a través de Internet.
sábado, 8 de mayo de 2010
Suscribirse a:
Entradas (Atom)